Modo claro/ Modo oscuro

domingo, 10 de mayo de 2020

Reencarné como una piedra - v1 - Capítulo 4

4 - Primera presa


Al recuperar el conocimiento todo parecía seguir igual. Me sentía extraño, puesto que hasta este momento no me había quedado dormido ni una sola vez. A causa de no tener manera alguna de controlar la hora tampoco sabía durante cuánto tiempo había perdido el conocimiento. Juzgando por el sol había pasado un día.


«Pues no me siento distinto. Veamos, ¡estado!»


Estado:

Nombre: Pedro Grava 

Especie: Piedra mágica | Raza: — 

Nivel: 1 | Experiencia: 0/300

PS: 15/15 | PM: 30/30 | Pozo de maná: 0/200

Estadísticas:

Vitalidad: 0 | Fuerza: 0 | Agilidad: 0 

Intelecto: 10 | Poder mágico: 20

Habilidades:

  • Cañón de maná: 1

  • Control de maná: 1

  • Rodar: 1

Habilidades especiales:

  • Ayuda: 2

  • Parasitar: 1

  • Pozo de maná: 1

Títulos:

  • Agresor interno

  • Piedra errante: 1

  • Piedra pensante

_________________________


«Pues sí, evolucioné… ¡pero sigo siendo una maldita piedra!»


Mi especie era otra distinta, cambié de piedra común a piedra mágica, pero por muy mágico que me hubiera vuelto, igualmente seguía siendo un maldito pedrusco. ¡¿Acaso no podría cambiar la parte de piedra de alguna manera?! Probablemente no...


Mis PS y PM aumentaron. Aparecieron algunas cosas que antes no estaban, como el nivel, y también estaba eso llamado pozo de maná a parte de las nuevas habilidades que había aprendido al atacar al limo, que no había revisado aún.


«Helpy, cuéntame sobre esas dos habilidades especiales… Eso de parasitar…»


[Parasitar: Permite consumir lentamente los PS y PM del objetivo con el que se está en contacto. En caso de que haya perdido el conocimiento o la capacidad de moverse voluntariamente también es posible controlarlo.]


«¡¿Acaso soy un alien come cerebros o parecido?! Como sea… No suena del todo mal… aunque es algo desagradable…»


Por algún motivo vino a mi cabeza la imagen de un riñón conmigo dentro.


«Puedo deducir por qué aprendí esa habilidad… ¿La otra?»


Había visto el mensaje cuando aprendí el Parasitar, pero no había visto nada del Pozo de maná. Probablemente lo aprendí automáticamente al evolucionar.


[Pozo de maná: Permite almacenar PM extra para un posterior uso. Capacidad: 200 por nivel.]


«¡Oh! Esa sí me gusta. Supongo que es una habilidad propia de la especie. Ambas habilidades parecen ser bastante útiles. Veamos, veamos.»


Empecé comprobando el pozo de maná transfiriendo quince puntos. Pude transferir el maná a voluntad con solo pensarlo. Con esto siempre podría tener un colchón de 200 de maná para emergencias. Básicamente era como tener una batería extra, con la diferencia que no se recargaba sola como el PM.


«Puede parecer algo tonto, pero sin duda es la habilidad más útil que he conseguido hasta el momento. Me he de asegurar de llenarlo siempre que pueda. También tengo que subirla de nivel cueste lo que cueste. No hay duda de que dependeré mucho de este pozo.»


Lo siguiente era la habilidad parasitar. El limo seguía vivo, pero su núcleo estaba parcialmente roto. Había dejado de moverse por completo y parecía estar muerto. Sin embargo, al inspeccionarlo pude ver que seguía vivo. Con suerte podría controlarlo un poco.


«Veamos maldito limo... ¡baila para mí!»


Realmente tomé el control del moco. Era un poco complicado de controlar, probablemente por la diferencia anatómica entre una persona y un moco viviente, pero me acostumbré con relativa facilidad. Al final empecé a perder el tiempo deformando y meneando al limo como un idiota.


«Eso es. Bota, bota, ea, ea. Arriba, abajo, arriba, de lado.»


Era divertido... hasta que volví a perder el control.


«No me digas… ¡Estado!»


Al revisar de nuevo mi estado me di cuenta de que mi maná había caído de nuevo a cero.


«Cómo no, controlarlo también consume maná. Bueeeeeeno, por lo menos consume mucho menos que rodar. Acabo de conseguir un buen transporte. Necesito más maná, mucho más maná… Maná… quiero maná… ¡Manaaaaaaaaá! Helpy, ¿cómo consigo maná?»


[Subiendo de nivel o con habilidades.]


«Subiendo de nivel… Cierto ahora tengo un nivel… ¡Bien! ¡Pues iré a subir de nivel! … Tocará esperar a que se recargue el maná. A menos que…»


Revisé de nuevo el estado del limo. Si no recordaba mal de la anterior vez, era bastante alto. Imaginé una sonrisa. Tenía otro pequeño pozo de maná de 81 puntos justo delante mío.


«Al final este limo será muchísimo más útil de lo que pensé.»


Le robé el maná al limo y esperé a ver si se le recargaba de forma natural como a mí. Por lo que pude ver, su maná se recuperaba en un punto cada aproximadamente cuatro segundos.


«Veamos… Si consumo un punto de maná cada diez segundos… Puedo controlar al limo durante unos cinco minutos con mi maná actual. Si a eso le sumamos el pozo de maná lleno… entonces puedo controlarlo por más de media hora.»


Yo recuperaba uno de maná cada más o menos seis segundos, el problema era que mientras usaba el parasitar no se recuperaba de forma natural. Tampoco podía robar PM mientras usaba la parte de control.


«También tengo que subir la habilidad parasitar, a ver si la cantidad de maná drenado aumenta… Bueno, supongo que subirá sola si no paro de usarla.»


Mi movilidad había aumentado considerablemente. Aún así, seguía estando limitada. También debía tener en cuenta que no debía quedarme completamente sin maná o podría ser peligroso.


«Para ser una piedra mágica que depende puramente del maná creo que tengo muy poco… Cierto, a duras penas soy un patético nivel 1 y ya tengo un colchón de 200… El limo tiene 81 al nivel 13… Quizás no está tan mal.»


Antes me parecía bastante desagradable estar atrapado dentro de un moco azul, ahora que lo controlaba yo empezaba a estar encantado por ello.


«Parece que en lugar de una piedra mágica haya evolucionado en un limo…»


***


Tras esperar a tener todo el pozo de maná lleno volví a mi camino. Empezaba a estar algo harto de este campo de hierbajos, donde los animales solo corrían de mí, o mejor dicho, del limo que me llevaba.


«Necesito encontrar monstruos de verdad, no animales normales y corrientes. Veamos, el lugar más adecuado para ello será, ¿un bosque?»


A lo lejos pude divisar una zona más frondosa. Si quería empezar mi caza probablemente ese sería el mejor lugar.


«¡Perfecto! Venga moco asqueroso, a toda máquina hacia allá.»


Quizás sería buena idea ponerle un nombre al limo… o quizás no. Helpy por lo menos hablaba, esta cosa ni eso. Como fuera, si en un futuro me apegaba mucho a él ya lo haría.


No tardé mucho en llegar a la entrada del bosque. Al principio era un grupo de árboles relativamente juntos, pero conforme me adentraba empezó a espesarse más y más, hasta volverse un poco sombrío y húmedo. No me preguntéis cómo sé lo de húmedo, ¿vale?


«Vine muy motivado, pero… ahora no estoy tan convencido de esto. Después de todo solo soy un mísero nivel 1. A pesar del nivel del limo... ¿Es este nivel de verdad alto? Helpy... venga cariño, cuenta un poco.»


[El nivel indica el crecimiento de un monstruo, no su poder real. Distintos tipos de monstruo difieren en fuerza a pesar de su nivel. Monstruos de mayor grado al nivel 1 pueden ser mucho más fuertes que un monstruo de nivel 20 de menor grado.]


«Perfecto, y no puedo ver las estadísticas. Me tendré que guiar por el PS y PM para hacerme una idea.»


De todos modos ya había entrado al lugar. Si me encontraba alguna cosa peligrosa… dejaría al limo tirado y me haría pasar por un mero pedrusco...


Por lo visto alguien me leyó la mente, puesto que nada más terminar de pensar en estas cosas pude escuchar el sonido de algo arrastrándose por el suelo del bosque.


«Por favor, no seas algo peligroso... Déjame matarte con facilidad...»


Seguí el sonido con la mirada hasta encontrar el lugar del que provenía. Cada vez estaba más cerca y no tardó en aparecer el causante. Era un puto bicho, un bicho bastante desagradable.



«¿Un ciempiés?»


Un “enorme” ciempiés blanco con rayas negras se paró a pocos metros de mí y se levantó sobre su parte trasera, mientras me observaba detalladamente.


Siendo más precisos, era idéntico a una jodida escolopendra de lo que calculo casi un metro de largo. Me acojonó un poco, puesto que era más grande que yo. Presumía de un cuerpo color blanco puro con un montón de rayas negras que la cubrían, parecidas a las de un tigre. La cabeza destacaba por un par de antenas bastante largas y dos prominentes mandíbulas más que desagradables.


«¿Esto qué es, una especie de mezcla entre ciempiés y tigre?»


[Quilópodo tigre blanco: Un tipo poco común de ciempiés tigre. A pesar de no poseer una gran fuerza, sus mandíbulas segregan un veneno paralizante capaz de aturdir a una persona adulta en pocos segundos. Tienen mala vista, pero usan sus antenas para detectar todo lo que les rodea y guiarse con precisión. A diferencia de otros quilópodos, son bastante inteligentes.]


Estado:

Nombre: — 

Especie: Ciempiés tigre | Raza: Quilópodo tigre blanco

PS: 93/93 | PM: 32/32

Nivel: 2

_________________________


«¡¿En serio?! Alguien tendría que pensar mejor los nombres de estas cosas. En fin, no parece muy fuerte. El limo lo es mil veces más. Por eso, ¡al ataque Limy!»


Al final le puse nombre al limo sin darme cuenta... No tengo remedio.


Me moví hacia el bicho, pero yo era muy lento y él increíblemente rápido. A pesar de poder escapar de mí con facilidad no lo hizo. Incluso se tomó la libertad de acercarse a inspeccionarme.


«Pues si no tienes intención de escapar… Veamos, veamos… ¿En qué se caracterizan los limos? ¡Ah, sí, tentáculos!»


Con un rápido movimiento extendí un fino tentáculo a modo de látigo y golpeé con todas las fuerzas que pude. Le di de lleno, mandándolo a volar. Al inspeccionarlo de nuevo vi que sus PS se habían reducido a 86.


«Pues le hice cierto daño… Entonces, si lo ato con los tentáculos quizás… No me veré como un pervertido peleando así ¿verdad?»


¡Kyyyyyyyyyy!


El bichejo dejó salir un chirrido desagradable. Sin duda alguna lo enfadé bastante.


«Oh, ¿no te gustó? ¡Pues toma esto!»


Alargué tres tentáculos más y, con cuatro brazos, empecé a golpear como hice antes. El ágil ciempiés se las apañó para evitarlos a duras penas.


«Ora, ora, ora, ora, ¿qué te parece si subimos el ritmo?»


Agregué dos tentáculos más, cosa que le hizo ya imposible de evitar mi ataque. Le golpeé por distintos lugares, sin darle mucho tiempo a reaccionar o contraatacar. Antes de darme cuenta, sus PS ya habían bajado a 54. A este ritmo no tardaría mucho en matarlo.


Al verse en mal lugar decidió retirarse a una distancia segura, pero ya me lo esperaba y preparé el cañón de maná de antemano.


«Inútil, inútil, inútil, ¡completamente inútil!»


Me salí un poco por encima del limo y disparé sin dudar. La bala voló directa al ciempiés y le dio de lleno. Por mala suerte sobrevivió con 13 de PS.


«¡Muere de una vez maldito insecto!»


No obstante se levantó con un veloz movimiento. Cargó a toda prisa contra mí, pasó a través de los tentáculos y, sin darme esta vez a mí tiempo para reaccionar, se puso de pie sobre sus patas traseras para luego tirarse él mismo dentro del limo, justo hacia donde yo estaba. Una vez tuvo su cabeza a mi alcance abrió la boca y me cogió con sus mandíbulas. Solo había metido la mitad de su cuerpo dentro, así que usó las incontables patas que habían quedado afuera para tirar de mí con todas sus fuerzas... Me sacó con suma facilidad. A causa de eso, perdí el control del limo.


«¿Eh? ¿Eh? ¿Queeeeeeeeeé?»


Si tuviera piel habría empezado a sudar intensamente.


«Esto, esto, esto... ¡Perdón, no lo volveré a hacer! ¡Sueltameeeeeeeeeee!»


Quedé completamente atrapado en las fauces del monstruo sin posibilidad de hacer nada para escapar. Al mismo tiempo que empezaba a morder con fuerza se fue corriendo hacia vete a saber donde, causando que me desorientara por completo. También pude ver como un líquido verde se derramaba por encima de mí. No obstante, no parecía hacerme ningún daño.


«Vaya, esto es bueno. Al final no me puedes hacer nada. ¡Jódete! ¡Soy una piedra! ¡Estoy duro y el veneno no me afecta!»


¡Crack!


Callé de golpe mis pensamientos al escuchar un sonido un tanto desagradable.


¡Crack!


«¡Mierdaaaaaaaa!»


Al mirar mi estado pude ver que mis PS se habían reducido a 9 en un momento. ¡Ese maldito bicho me estaba rompiendo!


«¡¿Cuánta fuerza tiene esta cosa?!»


¡Crack!


«Esto es malo, muy malo. No puedo quedarme parado. ¡Necesito soltarme!»


Podría disparar a bocajarro e intentar matarlo lo antes posible, pero los bichos a veces siguen apretando incluso después de cortarles la cabeza. No podía limitarme a simplemente matarlo. Lo primero que me vino a la mente fue usar algo para empujar hacia afuera su mandíbula y que dejara de apretar. Recordando la sensación de cuando usé el maná para rodar, me cubrí de tanto maná como pude en un momento.


¡Crack!


«Todo o nada, si esto no funciona estoy muerto… ¡Aparta!»


Tras haber concentrado todo el maná a mi alrededor lo liberé. Fue algo parecido al cañón de maná, pero en área. Funcionó tal y como pensé. La explosión se llevó por delante todo a cincuenta centímetros a mi alrededor. Por suerte yo salí intacto... Bueno, con 3 de PS y 0 de maná.


[Habilidad adquirida: Bomba de maná (Lvl - 1).]

[Título adquirido: La bomba (Lvl -).]


La cabeza del ciempiés desapareció entera y yo adquirí otra habilidad… También un título que, como los demás, parecía estar riéndose de mí.


«Iosu estaría orgulloso de mí… o maldiciéndome por conseguir un título que quisiera él… En fin, eso fue peligroso, muy peligroso. Mejor no subestimar nunca más a ningún monstruo.»


Sin embargo, la aparición de mensajes no había terminado. Por primera vez vi aparecer justamente lo que fui a buscar en ese bosque.


[Has obtenido 1089 de Experiencia.]

[Tu nivel ha subido a 2. A causa de tu especie, las estadísticas no suben.]

[Tu nivel ha subido a 3. A causa de tu especie, las estadísticas no suben.]


Por lo visto subí de nivel… dos veces... pero al parecer no ayudaba mucho.


Estado:

Nombre: Pedro Grava 

Especie: Piedra mágica | Raza: — 

Nivel: 3 | Experiencia: 339/675

PS: 3/25 | PM: 0/50 | Pozo de maná: 0/200

_________________________


Por lo menos subieron los PS y PM, un salvavidas sin lugar a dudas... pero no se recuperaron... Siquiera se rellenaron los conseguidos de más… Probablemente se recuperarían con el paso del tiempo… o eso quería creer.


«Las piedras también curan... ¿verdad?»

0 comentarios:

Publicar un comentario