5 - La ciudad negraNo puedo asegurar cuánto tiempo pasó antes de llegar a lo que parecía ser una ciudad. Nada más la tuvimos a la vista, Raidha se puso justo delante de mí y extendió sus cuatro extremidades superiores, de espaldas a la ciudad.—Bienvenido a Valdhoram, el corazón de este bonito mundo, Nilhemfir.No hay duda de que esta princesa estaba orgullosa de su ciudad, y su gran sonrisa lo demostraba.—¿De verdad esto es una ciudad?—Sí, ¿no es maravillosa? ¡Vamos!Me cogió de la mano y tiró de mí, arrastrándome a toda velocidad hacia la...